Foto: Thinkstock

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Seleccionar el producto apropiado marca la diferencia en el maquillaje. Y el labial no es una excepción. Al igual que otros productos de maquillaje, la barra de labios posee una amplia gama de colores, desde los más tradicionales y sutiles hasta los más impactantes y singulares.

Algo que muchas personas pasan por alto es que el labial presenta también diversas texturas y acabados para añadir color y realzar los labios. Sin embargo, para lograr el efecto deseado con los distintos tipos de lápices labiales, es preciso conocer más al respecto.



pintalabios cremoso

Se trata de la variante de barra de labios más clásica. Ofrece una buena cobertura, una fijación adecuada y se desliza con mayor facilidad durante la aplicación. No tiene brillo, pero sí aporta hidratación al color. Aquellas personas con arrugas alrededor de los labios deben ser cuidadosas al aplicar un lápiz labial cremoso, ya que tiende a difuminarse entre ellas.

pintalabios brillante

Pertenece al grupo de barras de labios que incorporan brillo en su composición de color. El brillo resplandeciente y sumamente nacarado confiere al color un efecto «fresco», «helado». Al pasar el labial brillante por el centro de los labios, se logra ensancharlos y añadir un toque sensual al maquillaje.



labial satinado

Aunque forma parte de la categoría de labiales mate, brinda color a los labios sin resecarlos. El labial satinado es más humectante que el mate y mantiene el color puro.

pintalabios mate

No posee brillo ni luminosidad, presenta un acabado seco con una hidratación mínima. El acabado mate otorga la máxima intensidad al color, o en el caso de los labiales nude, produce el efecto de «labios sin color». Es fundamental que los labios estén bien hidratados para aplicar el labial mate, de lo contrario lucirán agrietados.



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